El miércoles llega de nuevo a las pantallas españolas «Top Chef» y estrena un nuevo miembro del jurado, que cada año ha ido cambiando. Si en la primera edición a Alberto Chicote y a Susi Díaz los acompañaba el célebre «Chef del mar», Ángel León; en la segunda fue el turno del chef gallego Yayo Daporta. En la presente edición, el nuevo miembro de este tridente es Paco Roncero.
Este programa, como pasa en no pocas ocasiones, Antena 3 lo ha exportado de una cadena estadounidense desconocida en nuestro país, concretamente Bravo TV, que emitió el primer programa de Top Chef en marzo de 2006. De hecho, la primera vez que vi la versión estadounidense fue a través del Canal Cocina que emite en España a través de los operadores de cable.
Aunque en EEUU ya ha introducido diversas variaciones, dado que en España se encuentra en su juventud televisiva, conserva el espíritu inicial, lo cual es un acierto porque de este modo, se acostumbra al público a un determinado producto televisivo de manera que cuando se modifica el cambio es apenas perceptible.
La gastronomia está de moda, y no hace falta más que encender la televisión para darse cuenta de este hecho. A diario tenemos documentales, programas de cocina y programas de telerrealidad. Sin duda este hecho es positivo, porque siendo España cuna de grandes chefs mundiales era necesario que el arte de los fogones se situara en el lugar que le corresponde. Lejos ha quedado aquel programa entrañable de «Con las manos en la masa», presentado por Elena Santonja y que comenzaba con una composición de Joaquín Sabina. Este es nuestro pasado y es entrañable, pero el futuro depara mucho más.
Antena 3, esta vez como no se ha esperado a dar la sorpresa en el primer programa y ya ha desvelado a los concursantes de esta edición, y a buen seguro que nos harán pasar momentos entrañables, de nervios y risas frente al televisor. Una vez más han juntado veteranos con cocineros noveles, pero en cualquier caso todos tienen algo en común, quieren ser reconocidos como un miembro más del «Olimpo de la cuchara».
El Diorama 