Cada 9 de Octubre, Valencia se convierte en la capital del mazapán. Con la celebración de Sant Donís (San Dionisio) en castellano, las pastelerías y confiterías de la ciudad se afanan en la preparación tanto de este tradicional dulce valenciano en forma de frutas y verduras, como en la elaboración de «la piuleta i el tronaor» para regalarselo a la persona amada envuelto en un pañuelo. Es por esto, que esta tradición recibe el nombre de «la mocaorá» (de mocador, pañuelo en valenciano).
Aunque ahora esta dulce tradición se equipara únicamente con la celebración del Día de los enamorados valencianos, lo cierto es que su origen es más significativo desde el punto de vista histórico.
Durante siglos el 9 de Octubre se conmemoraba de forma ruidosa, con el disparo de cohetes, traca y actitudes no siempre cívicas, la entrada de Jaime I en Valencia, tras la Reconquista. No obstante, tras la Guerra de Sucesión (siglo XVIII) se prohibieron estas celebraciones, y en respuesta a esta censura los pasteleros de Valencia decidieron realizar unos dulces en forma de petardos, que son «la piuleta i el tronador». Junto con estos dulces también se fabricaban pequeñas frutas y hortalizas, que hacen referencia tanto a la fertilidad de la Huerta de Valencia y a las hortalizas que los moros regalaron a la reina Doña Violante de Hungría (esposa de Jaime I).
Y como estas tradiciones evolucionan en el tiempo, desde hace años las principales confiterías de la ciudad rivalizan por lograr los dulces más sabrosos, los escaparates más llamativos, y las recreaciones más logradas.
El Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia, con el objetivo de poner en valor este dulce tipicamente valenciano cada año organiza un concurso entre las pastelerías y confiterías de la ciudad y su área metropolitana, que ya va por su XXXIV edición.
El jurado de este certamen es heterogéneo con el objetivo de abarcar diferentes puntos de vista, así está constituido por profesionales del sector como Mariano Bellver, Francisco Marco y Vicente Navarro; de los medios de comunicación como Cova Morales; del mundo de la consultoría como Amalia Mazón; por parte de la Escuela Superior de Bellas Artes, los profesores, Tomás Viana y Ernesto Guzman; y por parte de las asociaciones de consumidores Amas de casa Tyrius y AVACU, Vicenta Alcácer, Fernando Móner, Isabel Calvo y Jesús Mora.
Todos ellos tras analizar todos las candidaturas establecieron los siguientes premios:
APARTADO DE “MOCADORÁ”
Pastelería Galán,
av. de les Corts Valencianes, 92 – Albal |
1º PREMIO |
Cifre Creaciones Artesanas
av. Constitución, 246 – Valencia Cifre Creaciones Artesanas av. Campanar, 5 – Valencia |
2º PREMIO
ex aequo |
La Tahona del Abuelo
c/ Conde de Alacuás, 1 – Valencia |
3º PREMIO |
Lázaro Moreno Pérez
c/ Aparicio Albiñana, 5 – Valencia |
4º PREMIO |
APARTADO DE ESCAPARATE Y TIENDA
Pastelería Galán,
Av. de les Corts Valencianes, 92 – Albal Cifre Creaciones Artesanas av. Campanar, 5 – Valencia |
1º PREMIO
ex aequo |
La tahona del Abuelo
c/ Conde de Alacuás, 1 – Valencia |
2º PREMIO
|
Cifre Creaciones Artesanas
av. Constitución, 246 – Valencia |
3º PREMIO |
Miguel A. Hernández
c/ Turia, 31 – Valencia |
4º PREMIO |
Así, que ya lo saben, tanto si quieren demostrar su cariño a la persona amada, como deleitar su paladar, no tiene más que dirigirse a una pastelería de su confianza y adquirir «la mocadorà» de Sant Donís.