Me indignan en sobremanera las actitudes humanas. No hemos aprendido nada… Pero tampoco puedo decir que me sorprenda.
Durante el confinamiento se nos ha llenado la boca de buenos propósitos, del mismo modo que lo hacemos en año nuevo, pero cuando la rutina nos asalta volvemos a las feos hábitos de antes.
España es un pais sucio esto lleva años siendo así, mucha gente por no hacer el esfuerzo de recoger un papel y llevarlo a la papelera lo deja caer en cualquier parte, por eso ahora que las normas se han empezado a hacer un poco más laxas las viejas costumbres han hecho su aparición y en alcorques, aceras, parques y un largo etcetera han aparecido nuevas muestras de nuestro incivismo: las mascarillas y guantes abandonados por doquier.
En un tramo de apenas 100 metros y haciendo un conteo rápido puedes encontrar material para llenar una caja. Es absolutamente vergonzoso. Una actitud totalmente censurable no sólo por la imagen que proyecta de esta sociedad que no muestra ni el más mínimo respeto por su entorno y sus semejantes sino también un peligro que entraña dejar estos enseres de protección que pueden ser portadores de contagio de enfermedades, no solo de Covid- 19 sino de muchas otras, porque aunque no se hable de ellas, el resto de las enfermedades no han desaparecido de la faz de la tierra.
En Italia, que también está sucediendo lo mismo… Siempre han dicho que nos parecemos y está claro que sí, han empezado a imponer sanciones que van desde los 25 a los 500 euros y aquí ya hay voces que están planteando lo mismo. ¿Es que aquí solo aprendemos a golpe de sanción?
No somos capaces de mostrar la madurez como sociedad que el tiempo presente nos exige, seguimos mecidos por el abrazo del egoísmo sin preocuparnos por lo que nos rodea y haciendo oídos sordos a los buenos consejos, aquellos que buscan encaminarnos a un futuro lleno de sentido que cuida el entorno y a las personas. No queda demostrado que no.
Soy una ilusa, pese a todo, esperaba mucho más, tenia la creencia de que algo había cambiado, que a partir de ahora se miraría al futuro con una visión más responsable y se actuaría en consecuencia, pero no. Seguimos igual.